La mayoría de los bebés no tienen unas pautas de sueño establecidas, por lo tanto, su ciclo de sueño se distribuirá de forma desorganizada, sin distinguir el día de la noche. Sin embargo, poco a poco, debéis ir enseñándole que, por la noche, debe dormir, y durante el día, estar despierto. Para inculcarle este aprendizaje resulta fundamental enseñarle unos hábitos saludables para dormir.
- Cómo favorecer el sueño del bebé
Las rutinas previas al momento de dormir le ayudarán no sólo a estar relajado y tranquilo, sino también, a descansar mejor, de este modo, conseguiréis reducir los despertares nocturnos.
Para establecer esta rutina antes del momento de dormir, es necesario que apliquéis cada día los mismos procedimientos, siguiendo además, un horario regular. Por esta razón os proponemos una rutina de sueño que podréis adaptar según vuestras necesidades.
- Tomar un baño relajante
El momento del baño suele ser especial y agradable tanto para el pequeño como para la madre, ya que le permitirá vivir nuevas experiencias sensoriales que, sumadas al agua caliente, y al agradable aroma de los productos de baño pensados para la higiene infantil, le ayudarán a conciliar el sueño posteriormente.
- Darle un masaje
El momento ideal para realizarlos será justo después del baño, mientras lo secas y le pones la ropa para dormir. Te permitirá proporcionarle afecto y ternura a tu pequeño, lo que posteriormente, le hará experimentar una sensación de bienestar física y emocional plena.
- Ponerle el pijama
Tras el masaje y las cremitas, llegará el momento de ponerle el pijama, que le ayudará a estar más cómodo y relajado. En invierno, el pijama debe abrigarle, pero no acalorarlo, ya que si el bebé pasa calor por la noche, no dormirá relajado y se despertará cada cierto tiempo.
- Darle de comer
Si decides dar el pecho a tu bebé, debes saber que, durante la noche, el nivel de prolactina, la hormona encargada de la producción de leche, será más elevado, favoreciendo su relajación y su posterior sueño.
- Crear una atmósfera adecuada en su habitación
La habitación del bebé debe tener las condiciones necesarias para que inviten al descanso, como por ejemplo, un ambiente tranquilo, una temperatura adecuada, una luz tenue de fondo y la oscuridad necesaria para favorecer su sueño.
- Cantarle una nana
Las nanas, cantadas de forma lenta, casi susurrando, resultarán enormemente beneficiosas para el sueño del bebé, ya que le ayudan a sincronizar la respiración, ralentizan su ritmo cardíaco y disminuir su tensión muscular. Sin duda, es uno de los métodos más eficaces para ayudar al bebé a dormirse.