Las nanas son canciones de melodías agradables que se han utilizado desde el principio de los tiempos para calmar a los bebés y ayudarles a dormir. La mayoría de ellas tienen origen latino y se basan en motivos religiosos, dado que muchas de ellas se compusieron para el niño Jesús.
El recién nacido no entiende lo que se le canta, pero sí percibe la melodía y la manera en que la mamá o el papá le cantan, y eso es lo que realmente le hace sentirse seguro, como cuando estaba dentro del vientre materno.
Es por este motivo, por el que si no conocéis la letra de las nanas no importa, ya que simplemente con tararear su melodía bastará para que se tranquilice.
Aquí os dejamos una selección de algunas de las nanas más bonitas que existen:
“Canción de cuna” por Johannes Brahms
Buenas noches mi bien,
sea tu sueño tranquilo,
duerme niño feliz,
que vigila mi amor.
Si lo quiere el Señor,
la mañana estival,
te despierte mi bien,
con un rayo de sol.
“Cinco angelitos”
Por el arco iris vienen caminando
cinco angelitos con los pies descalzos;
uno trae la leche, el otro trae pan,
los tres más chiquitos, queso y mazapán.
Duérmete mi niño, duerme hasta mañana,
Que los angelitos vendrán a tu cama,
Jugaran contigo, te leerán un cuento
y al despedirse te darán un beso.
En las zapatillas te van a dejar,
el pan y la leche, queso y mazapán.
“Estrellita, ¿dónde estás?”
Estrellita, ¿dónde estás?
Me pregunto quién serás.
En el cielo o en el mar,
Un diamante de verdad.
Estrellita, ¿dónde estás?
Me pregunto quién serás.
Cuando el sol se ha ido ya
Cuando nada brilla más
Tú nos muestras tu brillar
Brillas, brillas, sin parar
Estrellita, ¿dónde estás?
Me pregunto quién serás.
Estrellita, ¿dónde estás?
Me pregunto quién serás.
En el cielo o en el mar,
Un diamante de verdad.
Estrellita, ¿dónde estás?
Me pregunto quién serás.
“A la nanita nana”
A la nanita nana nanita ella, nanita ella,
mi niño tiene sueño bendito sea, bendito sea.
(repetir)
Fuentecita que corre clara y sonora,
ruiseñor que en la selva cantando llora,
calla mientras la cuna se balancea,
a la nanita nana, nanita ella.
A la nanita nana nanita ella, nanita ella,
mi niño tiene sueño bendito sea, bendito sea.
Fuentecita que corre clara y sonora,
ruiseñor que en la selva cantando llora,
calla mientras la cuna se balancea,
a la nanita nana, nanita ella.
“Arrorró”
Arrorró mi niño,
arrorró mi sol,
arrorró pedazo,
de mi corazón.
(repetir)
Este niño lindo
que quiere dormir;
y a ti el caro sueño
no quiere venir.
Arrorró mi niño,
arrorró mi sol,
arrorró pedazo,
de mi corazón.
(repetir)
A dormir la rosa
en los rosales;
a dormir mi niño
que muy tarde es.
“Duérmete niño”
Duérmete niño,
duérmete ya,
que si no vendrá el coco
y te comerá.
Esta última nana está generando mucho debate por mencionar al “coco” en ella, llegando a cuestionar si es una buena letra para una nana. Si os resulta muy violento cantarla así, siempre podréis utilizar su versión en inglés, “Rock a bye baby” como se puede escuchar en el vídeo, o simplemente tararearla.