Bajo la denominación de Dermatitis del pañal se agrupan distintas afecciones que afectan al culito del bebé, las cuales, son producidas por diversas causas. En la mayoría de los casos consiste en una simple irritación que se puede prevenir manteniendo seca la zona del pañal, y se puede tratar aplicando una cremita a base de óxido de zinc. En otras ocasiones se originará por la aparición de hongos o a causa de una excesiva acidez en las heces.
• Causas de la Dermatitis del pañal
Tal y como hemos mencionado anteriormente, existen diferentes tipos originados por distintas causas, donde en cada caso, observaréis unas características determinadas:
- La humedad. Si después de que bañéis a vuestro bebé, no se le secáis bien, la humedad acumulada en los pliegues de la piel, junto con las sustancias ácidas de la orina o las heces, producirán irritaciones.
En este caso, observaréis zonas de piel enrojecida que va cambiando de lugar de un día para otro. Si vuestro bebé es de piel clara, tenderá a sufrir más irritaciones y más virulentas, que si es de tez más morena.
- Los hongos. El más habitual es el “Candida albicans” (también conocido como Muguet), el cual, se desarrolla en un ambiente cálido y húmedo, como lo puede ser el interior de un pañal.
En este caso, la piel se mostrará enrojecida, y a medida que pasen los días, la zona de piel afectada se irá extendiendo, observando además pequeñas manchitas rojas bordeadas de un halo blanco, así es como identificaréis la presencia de hongos.
- Heces muy ácidas. Al igual que sucede en el caso de la diarrea cuando el bebé no tolera la lactosa de la leche, el enrojecimiento se localizará, primeramente, alrededor del ano, para luego ir extendiéndose de forma indiscriminada por toda la zona del pañal.
En este caso, vuestro hijo llorará cada vez que haga caca, ya que la acidez de la misma le provocará un fuerte escozor.
• ¿Cómo se puede prevenir la Dermatitis del pañal?
Evitar las irritaciones es fácil si conseguís mantener seca la piel del culito de vuestro bebé, siempre que le deis un baño o le cambiéis de pañal.
Es fundamental que después de cada baño, sequéis a conciencia todos los pliegues (axilas, ingles, entre los dedos, cuello, orejas, ombligo, etc...) con la toalla. Para el cambio de pañales, bastará con que utilicéis una esponja con agua tibia, secándolo bien después con una gasa.
Las toallitas humedecidas comerciales son cómodas para cuando se sale de casa, pero para algunos bebés resultan irritantes. Si el bebé tiene ya irritada la zona, no conviene usarlas.
Evitar la aparición de hongos resulta más complicado, sin embargo, observando a diario su boca, podréis tratar preventivamente la aparición de hongos, ya que éstos suelen manifestarse también en dicha zona.
En caso de diarrea, bastará con que cambiéis el pañal a menudo, usando sólo agua, y no toallitas.
Si el culito se irrita en exceso, además de usar crema protectora, quizá sea recomendable que cambiéis su alimentación por unos días (utilizando leche sin lactosa).
• ¿Cómo se puede tratar la Dermatitis del pañal?
Tal y como hemos mencionado antes, será necesario que apliquéis pomadas específicas contra irritaciones, sin embargo, no hará falta que se la apliquéis todos los días, ya que si la piel está seca, no se irritará.
Las mejores cremas para este tipo de irritaciones presentan un aspecto blanco y muy espeso, debido a que el óxido de zinc es su principal componente. En este caso, deberéis evitar aquellas que contengan antibióticos y corticoides, salvo en casos muy concretos.
Si observáis la presencia de hongos, entonces deberéis acudir a la consulta del pediatra para que os recomiende un producto antimicótico eficaz para estas situaciones.
