La ciudad proporciona una amplia oferta de entretenimiento para pasar el día en familia, razón por la cual, veamos a continuación 4 actividades que pueden escogerse para compartir el tiempo de ocio en compañía de toda la familia.
• La Bolera
Ir a la bolera es una actividad lúdica de precisión, cuyo principal atractivo radica en que puede participar toda la familia, e incluso, varias familias con niños.
Además, las boleras suelen estar situadas en zonas comerciales en las que podemos encontrar un plan B para entretener a los niños, mientras los mayores juegan una partida.
Por último, cabe mencionar que a partir de los 7 u 8 años, el niño ya será capaz de manejar las bolas de menor tamaño (3 Kg).
• El Mini-golf
El mini-golf es otra de las actividades que puede compartir toda la familia, tanto para aquellos que ya sepan jugar, como para los más pequeños de la familia, quienes se iniciarán en esta variante del golf, cuya principal diferencia radica en que los recorridos serán más pequeños, pero llenos de obstáculos que dificultarán la labor de introducir la bola en el hoyo.
Debido a que ofrece todo tipo de circuitos adaptados al nivel del participante, tanto padres como hijos podrán practicar su “swim”.
• El Salón Recreativo
Otra excelente manera de pasar la tarde en familia es acudir a un salón recreativo de un centro comercial, donde los más pequeños podrán disfrutar de juegos como el futbolín, los aero-discos, el lanzamiento de canasta, las máquinas recreativas, el lanzamiento de bolos, etc…
En este caso, además de pasar un rato divertido, el hecho de estar situado en un centro comercial permitirá comer y visitar tiendas, de modo que se podrá ir desde por la mañana hasta la hora del cierre, combinando los juegos con otras actividades suplementarias, como por ejemplo, el cine o la tienda de videojuegos.
• Patinaje sobre hielo
Por último, cabe mencionar que el patinaje sobre hielo es una excelente actividad para compartir una tarde en familia, aunque los más pequeños no sepan patinar, lo que resultará una buena excusa para enseñarles y demostrar lo mucho que saben sus padres.
Lo bueno de esta opción radica en que al no tener que invertirse toda la tarde, se podrá combinar con otras actividades, como por ejemplo, ir a comer a un restaurante, tomar un helado o ir después a la bolera.