La migraña es un dolor de cabeza de carácter intenso que afecta a un lado de la cabeza, aunque a veces puede afectar a ambos. El dolor empieza sin previo aviso, repentinamente, y puede acompañarse de síntomas neurológicos, visuales o gastrointestinales.
En los últimos años se ha observado que las migrañas han aumentado en los niños. Aproximadamente un 10% de ellos que van a la guardería lo sufren. Este porcentaje aumenta hasta el 50% entre los niños que van a la escuela de primaria.
Las causas de las migrañas no están claras. A día de hoy se sigue investigando sobre ellas, para llegar a una solución 100% efectiva. Los síntomas que manifiestan los pacientes son dolores fuertes en la cabeza, como si les golpearan con un martillo. Hay casos en los que estos dolores son tan intensos que llegan a provocar mareos, vómitos o náuseas. Incluso aumenta la sensibilidad ante estímulos como la luz, pequeños ruidos y olores. En cuanto a la duración, puede tratarse de minutos o prolongarse hasta una, dos o tres horas.
Hay algunos factores que apuntan como posibles causas de las migrañas, tanto en niños como en adultos:
• Falta de sueño, cansancio y fatiga.
• Estado constante de estrés y ansiedad.
• Mala alimentación.
• Deshidratación.
• Cambios Hormonales.
• Consumo exagerado de aparatos electrónicos (televisión, videoconsola, ordenador).
• Lesiones físicas (haber sufrido un fuerte golpe en la cabeza).
Para intentar prevenir las migrañas en los pequeños es aconsejable llevar una vida equilibrada. Esto quiere decir, que no viva en atmósferas de estrés constante, que tenga tiempo para hacer bien sus comidas, descansar, hacer los deberes y jugar cuando toque. Controlar el tiempo que está delante de la televisión, jugando al ordenador o videoconsola.
Estos remedios caseros son efectivos en su justa medida, aunque siempre es aconsejable ir a un especialista para que le recete algún medicamento que mitigue el dolor.