El miedo es un sentimiento natural y comprensible, no solo los niños tienen miedo, los adultos también. En este caso, vamos a ver como podemos ayudar a los niños a vencer su miedo a la oscuridad.

En primer lugar, tenemos que dejar claro que este tipo de fobia, es muy típica entre los pequeños, normalmente no hace falta la ayuda de ningún terapeuta, pero hay casos, que los niños, se resisten a enfrentarse a este miedo, entonces sí necesitamos llevarlos a terapia, para que consigan avanzar y no quedarse paralizados siempre que se apagan las luces.

La mayoría de las fobias uno las vence enfrentándose directamente a ellas, y cuando ve que no pasa nada, el miedo se desvanece. Los niños, son igual que nosotros, por lo que el procedimiento es el mismo, lo que pasa que no tienen la capacidad de aguante que pueda tener un adulto, asique se hace poco a poco y al principio acompañados por vosotros. Podéis hacer ejercicios diarios, por ejemplo, meteros en su habitación con las luces apagadas cinco minutos, así verán que no pasa nada. Poco a poco ir incrementando el tiempo, cuando veáis que ya estando con nosotros no les da miedo, podemos empezar el proceso con ellos solos.

Otra manera de combatir el miedo a la oscuridad es a través del juego, los niños asocian el juego como algo positivo. Podemos jugar con ellos a tinieblas, una especie de escondite pero a oscuras, así empezaran a estar en contacto con la oscuridad, verán que no pasa nada y puede ser divertido. Poco a poco ese miedo se irá desvaneciendo.